A los que nos gusta cuidar nuestro coche como si de un hijo se tratase nos interesará saber esto. ¿Sabéis cómo calentar el motor del coche? Hay varios bulos y falsos mitos extendidos en este país que han hecho más daño que bien, así que desde Desguaces La Cabaña os explicaremos la mejor forma de calentar el motor de un vehículo para cuidarlo al máximo.
Dejar calentar el motor a ralentí unos minutos, el falso mito
¿Eres de los que enciende el motor y espera hasta 5 minutazos para que el motor coja temperatura? Ahí va uno de los grandes falsos mitos sobre esta técnica y posiblemente el mayor de los errores. Los expertos además nos lo enseñan con datos y colores:
La realidad es que dejar el motor calentar a ralentí lo único que hará es que tu gasto en gasolinera aumente sin ningún tipo de sentido, ya que el motor necesita la resistencia que ofrece el peso, viento y fricción del suelo para alcanzar una temperatura óptima, o lo de contrario tardará más de 20 o 30 minutos en calentar el aceite hasta temperatura de servicio.
¿Cómo caliento el motor del coche correctamente entonces?
Lo más fácil es recurrir a la pura lógica. El motor de cualquier vehículo, ya sea coche, moto o camión, está diseñado para hacerse funcionar en multitud de escenarios, muchos de ellos bajo cero. Así que en un país caluroso como es el nuestro, incluso en la zonas más norteñas, hace que no tengamos que obsesionarnos con esta práctica en nuestro arranque mañanero.
Pero debemos de tener en cuenta que de por sí somos unos enfermos del cuidado de nuestro vehículo, así que lo que deberemos hacer es encender el motor lo primero de todo. Una vez el motor esté encendido, el aceite comenzará a lubricar todas las partes móviles del conjunto, tanto del bloque motor, como de la caja de cambios y demás accesorios. En este momento, ya puedes iniciar tu marcha, pero como enfermo que eres esperas. ¿Cuánto hay que esperar? Sólo debes esperar entre 30 segundos y 1 minuto, nada más. El tiempo que tardas en quitarte la chaqueta, ponerte el cinturón, conectar el móvil y elegir tu música favorita, o el que tardas en abrir la puerta del parking.
Ahora toca lo más importante: circular de manera progresiva y suave durante los primeros 10 kilómetros. Hacer trabajar la mecánica de forma tranquila, sin acelerones bruscos y entregas de potencia contundentes hará que el motor coja temperatura de servicio de forma natural. Por lo general, no deberemos pasar, a no ser que la ocasión lo requiera (cuestas o situaciones comprometidas) de las 3.000 rpm en un gasolina y las 2.500 rpm en un diésel. Esta es la única forma correcta y veraz de calentar el motor de un vehículo, sin más florituras.
NOTA: la temperatura que suele aparecer en la mayoría de vehículos es del refrigerante, y no del aceite, lo más importante. El aceite suele alcanzar su temperatura de servicio en 10 kilómetros o en 10-15 minutos de uso. Hasta ese momento, deberíamos evitar intentar sacar el máximo potencial del motor.
Enfriar el motor al llegar a destino, sí y no
La práctica de dejar enfriar al motor al llegar a destino es otro de los falsos mitos que existen, ya que pese a que la idea es buena, está mal explicada. En los motores atmosféricos, no es necesario esperar a que se refrigere a no ser que vengamos de hacer unas tandas en circuito, con apagar es suficiente. En los motores con turbo, sí que es necesario, pero ¿cuánto?
En un motor sobrealimentado con un turbocompresor, el turbo trabaja a un alto régimen de revoluciones por su propia naturaleza. Su lubricación se basa en aceite. Son piezas que alcanzan mucha temperatura en momentos dados y que también se enfrían de forma rápida, es decir, una pieza con mucho contraste. Lo vital para ellos después de venir por autopista, en conducción deportiva, o simplemente en momentos en los que hayamos que tenido que pisar más de la mitad del acelerador, es dejarlos reposar a ralentí otros 30 segundos o un minuto antes de apagar, incluso al parar en una gasolinera.
De esta forma, el aceite y la pieza metálica bajará de temperatura de forma progresiva. Si paramos el motor sin dejar reposar, conseguiremos que el aceite caliente no se mueva, se quede en el turbo y se pueda llegar a solidificar debido al contraste de temperatura, lo que ocasionará graves averías en el turbo. Con otros 30 segundos o un minuto, lo que vuelves a tardar en quitarte el cinturón, desconectar el móvil y coger la chaqueta, es más que suficiente. No hace falta estar 3 minutos como algunos locos, a no ser que tengas un coche de altas prestaciones y una conducción muy deportiva.
Hay vehículos nuevos que incluyen un sistema para que no te tengas que preocupar de ello, pero la espera de 30 segundos no influirá en tu vida diaria.
¡Ahora ya sabes cómo calentar el motor de tu coche de verdad!